No se trata de un Mesías, pero está claro que Stalin González no pasa desapercibido ante los ojos de una sociedad, agotada por los discursos de la cuarta y quinta república, que ve en los universitarios un nuevo camino a la solución del clima de polarización que vive el país.
Sabe muy bien que la lucha por los derechos consagrados en la Constitución es de largo aliento, pero la considera ineludible.
Por ello, dejó atrás la batalla que venía librando por las becas y el comedor, como presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, para oponerse a la medida contra Radio Caracas Televisión, que -desde su punto de vista- vulnera la libertad de expresión.
Mas ácidol: El Nacional
Qué no pasa desapercibido? Por favor, sin duda es uno de los tipos más nulos de la escena política nacional. Que idiotas, jajaja...
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