El hijo mayor del general, Raúl Emilio Baduel, narró al canal que los funcionarios interceptaron el carro donde Baduel se desplazaba junto con su esposa, Cruz María Baduel, y apuntándole con armas le ordenaron bajarse del carro, amenazando con incluso cortar el cinturón de seguridad para que se bajara. Impidieron que tomara su celular o que su esposa lo hiciera, y lo habrían montado en una camioneta pick-up sin marcas, placa ABZ-195G, para luego llevarlo a un lugar aún desconocido.
"No entendemos a qué se contrae esta situación, por cuanto él ha cumplido con cada una de las citaciones de este proceso cargado de ilegalidades en su contra", dijo Mora Tosca, quien se dirigía a la sede de los tribunales militares para averiguar la situación del general. Extraoficialmente se conoció que el general Baduel tendría una medida de privativa de libertad por enriquecimiento ilícito, pero su abogado desconocía la medida.
"El caso de Baduel ha estado signado por una serie de arbitrariedades e irregularidades", explicó. "El Código Orgánico de Justicia Militar prevé que el único funcionario instaurado para abrir un caso de un militar es el fiscal general ante una corte marcial. Al general Baduel se le ha negado la posibilidad que se lleve a cabo el juicio ante los autoridades competentes. Este juicio tiene todas las posibilidades de declararse nulo".
Baduel tiene un juicio en su haber por supuesta sustracción de recursos durante su gestión como ministro de la Defensa entre junio de 2006 y julio de 2007.
"Esperamos que esto no sea una epidemia de violaciones de personas que tengan de contraparte el estado venezolano", dijo Mora Tosca. "Ya él tiene una amenaza contra su vida, y esperamos que no le suceda nada por un supuesto intento de subordinación.
"Él debe estar en comunicación con su familia, debe estar con sus abogados, tiene derecho a permanecer en libertad mientras que su juicio esté en curso", añadió.
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